Guía para lijadoras de banda
Las lijadoras de banda son perfectas para trabajos pesados de lijado y desbaste. ¿Quieres comprar una? Estas son nuestras recomendaciones principales que te guiaran.
¿Qué es una lijadora de banda?
La lijadora de banda es una máquina de alto rendimiento que dispone de una banda continua de lija que gira sobre dos rodillos giratorios. El diseño de la herramienta es muy similar al de una cinta de correr. Su rodillo de tracción está conectado al motor —generalmente mediante una correa— mientras que el segundo rodillo gira libre permitiendo así el movimiento continuo de la lija.
Tipos de lijadoras de banda
Existen varios tipos de lijadoras de banda según el tipo de tarea a realizar. En primer lugar distinguimos entre las lijadoras de banda portátiles y las estacionarias. Las segundas se utilizan en el taller y están ancladas al banco de trabajo o incluyen su propia estructura metálica. Las lijadoras de banda portátiles, aunque también es posible fijarlas a la mesa, son más manejables y se pueden utilizar directamente para desbastar muebles, puertas o suelos de madera.
Además, existe otro tipo de lijadora de banda, más estrecho, ideal para lijar en lugares de díficil acceso como los intersticios que se forman en las barandillas metálicas (o de madera) entre barrote y barrote.
Las lijadoras de taller pueden ser horizontales o verticales; estas últimas suelen utilizarse para el afilado de cuchillos y herramientas de corte.
Por último, existen lijadoras de banda industriales especiales para el acuchillado y lijado de los suelos de parquet o tarima. Las acuchilladoras de suelo se pueden alquilar en empresas de alquiler de maquinaria para el acuchillado de pisos de madera. Además de la máquina principal, existe una segunda máquina más pequeña ideal para llegar a los rincones de la habitación.
¿Para qué se utilizan las lijadoras de banda?
Este tipo de lijadora es la más potente de todas y se utiliza cuando se requiere arrancar una gran cantidad de material. Las lijadoras de banda se pueden utilizar para lijar e igualar pisos de madera (parquet o tarima), para el lijado de muebles, puertas de madera, vigas y traviesas, mesas, estanterías, etc.
La lijadora de banda permite un rápido desbaste del material a eliminar. Gracias al movimiento continuo del cinturón de lija, el serrín tiende a embozarse menos que en las lijadoras orbitales y rectangulares.
Al igual que en cualquier otra labor de lijado, se pueden equipar diferentes granos de lija en las lijadoras de banda. Se comienza por los granos más bastos (grano 40, grano 80) y después se cambia a un grano intermedio (120, 160). Por último se puede hacer una pasada con grano fino (180, 220) o bien, hacer este último paso con una lijadora plana, con la que lograremos una mayor precisión en el acabado
Ventajas
Algunas de las ventajas de estas herramientas son:
- Alta capacidad de desbaste
- Mayor duración de las hojas de lija
- Posibilidad de realizar biseles con la ayuda del tope angular (en algunos modelos)
- Posibilidad de utilizarla como lijadora de banco (en algunos modelos)
La ventaja fundamental de una lijadora de banda es su capacidad de desbaste. Estas máquinas son ideales para lijar grandes superficies en los que se requiere eliminar altos espesores de pintura o barniz. La lijadora de banda es la más potente de todas las lijadoras: su rendimiento es muy superior a cualquier otro tipo de máquina, incluida las rotoorbitales.
Gracias a estas herramientas podemos realizar labores de lijado intensas que serían casi inviables con lijadoras rotatorias o lijadoras con base plana tipo rectangular o delta. Las hojas de lija de estas máquinas se embozan mucho menos que las del resto de lijadoras lo que ayuda a que su rendimiento se mantenga bastante alto.
La duración de las bandas de lija es muy superior a las hojas cuadradas o circulares.
Inconvenientes
El principal inconveniente de la lijadora de banda es la irregularidad del acabado. Debido a la gran capacidad de desbaste que tienen estas lijadoras, rebajar la misma cantidad de material en toda la pieza no resulta tan sencillo, especialmente en superficies planas grandes (en listones es más fácil). Por eso, si se quiere dejar un acabado fino, es recomendable terminar la pieza pasando una lijadora plana con grano fino para eliminar las irregularidades que deja la lijadora de banda.
Debido al diseño de la herramienta, la lijadora de banda no puede llegar a lijar las esquinas interiores. Esto nos obliga a terminar los rincones con otro tipo de lijadora (por ejemplo con una lijadora triangular o delta).
Otro inconveniente de las lijadoras de banda, al lijar piezas estrechas, listones, cantos de tablas, etc., es que la excesiva potencia de estas lijadoras puede redondear el biselado de estas piezas alterando la estética del mueble.
Por último, este tipo de lijadora es algo más peligrosa que las lijadoras orbitales para madera, ya que tiene riesgo de atrapamiento. Se debe evitar el uso de ropa suelta, guantes poco ajustados, pelo largo, cintas y cualquier otro tipo de colgante que pudiera ser atrapado por los rodillos de la lijadora de banda.
Alternativas a la lijadora de banda
Aunque esta herramienta es la más potente y eficiente en las tareas pesadas de desbaste y arranque de material, también tiene el inconveniente de un acabado irregular: más basto y tosco y con marcas en la superficie. Una alternativa que deja un mejor acabado y una eficiencia similar es la lijadora excéntrica de órbita aleatoria. Esta máquina está diseñada para no pasar dos veces sobre el mismo lugar: lo que elimina las marcas en la superficie. Además, gracias a la combinación del movimiento oscilante (vibración) y giratorio se evita la saturación del papel de lija, lo que permite un alto rendimiento.
Averías y mantenimiento
La avería más frecuente que sufren las lijadoras de banda es la rotura de correa de transmisión o la del eje de cualquiera de sus rodillos (uno es de tracción y el otro gira loco). Ni que decir tiene, que las máquinas baratas de bricolaje son más propensas a romperse que las profesionales. La mayoría de los fabricantes de máquinas de lijar de cinta ofrecen un servicio técnico de piezas de repuesto. Sin embargo, en muchas ocasiones, el coste de las piezas supera al de la máquina entera ya que algunas marcas «abusan sin piedad».
La política del alto precio de las piezas de repuesto es similar en casi todas las empresas, responde a lo que se conoce como obsolescencia programada. Es tristemente conocido el caso de la bombilla estadounidense que lleva más de un siglo operativa. La tecnología para fabricar cualquier tipo de bien, ya sea una bombilla o una lijadora de cinta, está lo suficientemente avanzada como para evitar muchas de las roturas. Sin embargo, se opta por lo contrario: por debilitar algunas zonas de la herramienta para que se rompa al cabo de uno años. De esta forma, la empresa se asegura la venta de una nueva herramienta. Claro está que el comprador podría escoger otra marca de máquinas de lijar pero como muchas de las empresas se «ponen de acuerdo» para aplicar esta medida, en el cómputo final, todas salen ganando. ¿Lo hacen realmente todas? No, y no es fácil tampoco demostrar que se haga. Pero sí llama la atención como muchas de las lijadoras, incluso si han sido utilizadas por diferentes usuarios, se rompen con el mismo tipo de avería, y aproximadamente a las mismas horas de uso. ¿Qué se puede hacer?
Si prevemos darle un gran uso a la lijadora de cinta lo mejor es comprar una máquina profesional de una buena marca. Las marcas como Makita, DeWalt o Bosch Professional fabrican lijadoras que son notablemente más resistentes que las de la «gama bricolaje». No quiere decir que no se nos vaya a romper, pero si que resulta menos probable. Nos durará muchos más años seguro. Además, la repercusión de cambiar una pieza de repuesto, aunque su precio sea abusivo, en una lijadora profesional es menos elevado que una de las baratas. Los materiales, el diseño de los mecanismos, el interruptor, el motor, las ranuras de refrigeración… Son elementos que han sido diseñados para durar en este tipo de máquinas de lijar. Los conspiranoicos lo verán al revés, pensarán que han sido diseñados «para romperse» en las máquinas de bricolaje. En cualquier caso, la idea es la misma. Las máquinas profesionales duran más que las de bricolaje.
En cuanto al mantenimiento, estas máquinas no exigen una rutina demasiado laboriosa. Con soplar la máquina de vez en cuando, para eliminar el serrín de las ranuras de ventilación y de los rodillos tractores será más que suficiente. También sustituiremos las escobillas eléctricas (los carbones) cuando sea necesario. Los chisporroteos del motor, el olor y el bajo rendimiento de la lijadora de cinta nos avisarán de cuando ha llegado el momento de hacer el cambio.
Medidas de seguridad
Aunque las lijadoras de cinta no son máquinas excesivamente peligrosas, su uso implica algunos riesgos:
- Riesgo de abrasión: el contacto de la piel desnuda con la banda de lija puede producir pequeñas heridas y abrasiones en la piel. Este riesgo es mayor cuando se utiliza la máquina en modo estacionario y se lijan piezas muy pequeñas.
- Riesgo de atrapamiento: las ropas holgadas, el cabello o los complementos de bisutería pueden ser arrastrados por la banda de lija y quedar atrapados por los rodillos. Por lo tanto, es muy importante extremar la precaución y no llevar ningún tipo de prenda suelta, cadenas o relojes. El pelo largo debe estar bien recogido y si se utilizan guantes, nos aseguraremos de que queden bien ajustados a la mano.
Asimismo, se deben utilizar gafas de seguridad, cascos de protección auditivos y mascarilla de protección respiratoria para evitar respirar el polvo (el serrín de algunas maderas duras es cancerígeno). Además, la lijadora de banda es una máquina que solo debe utilizarse en seco: la entrada de agua en su interior aumenta el riesgo de que el usuario reciba un choque eléctrico.
Otra medida de seguridad que hay que contemplar es que se debe evitar a toda costa el uso de bandas de lija extremadamente desgastadas (se pueden romper sin aviso previo y salir proyectadas contra el usuario).
El uso prolongado de la lijadora sobre la superficie de trabajo puede sobrecalentar la máquina y la pieza. Cuando se lija metal y madera existe un pequeño riesgo de incendio (las chispas y partículas metálicas al rojo vivo pueden inflamar el serrín). El riesgo es aún mayor si se han lijado pinturas o barnices basadas en poliuretano. Por ello, antes de abandonar el trabajo, se debe vaciar el depósito de la lijadora de banda. Además, en la medida de lo posible se debe evitar sobrecalentar la pieza de trabajo.